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Pía Aravena, enfermera de Asodial: “Con los pacientes se viven las alegrías, se viven las penas, pasan a ser parte de nuestra familia”

Noticias / www.anadi.cl
07 Abril 2023

Pía Aravena Muñoz (39) es oriunda de Punta Arenas, pero actualmente vive en la Quinta Región. Madre de dos niños, Agustín de 9 años y Gael de 2 años, debe dividir sus mañanas entre llevar a sus hijos al colegio y llegar a su trabajo, ya que el primer turno de los tratamientos de diálisis inicia temprano. “El día a día es caóticamente hermoso, como dice el comercial”, señala sonriente. Desde 2016, Pía trabaja como enfermera en un centro de diálisis de Asodial, en la sucursal denominada “El Belloto”, en la comuna de Quilpué. A pesar de lo intensa de su labor, señala que es “una experiencia muy bonita ya que se crean lazos muy fuertes con los pacientes. Acá el paciente es más que un número, somos todos personas”.

¿Cuándo y por qué, según su perspectiva, la nombraron enfermera coordinadora?

  • Desde el año 2017 comencé como enfermera coordinadora en Asodial Quintero hasta el 2020, luego me cambié de sucursal a Asodial El Belloto desde el 2020 hasta la fecha en coordinación. Sobre por qué me eligieron, encuentro que es una pregunta difícil, no soy de esas personas de nombrar cualidades de uno mismo. Pero yo creo que los dueños vieron en mí el compromiso, las ganas de aprender, la entrega hacia los pacientes, y lo más importante, el respeto. Por ese motivo creo que vieron potencial en mí y me ayudaron a explotarlo al máximo. Siempre agradecida de la oportunidad y la confianza.

¿Cómo ha sido la experiencia de trabajar en Asodial? 

  • Trabajar en Asodial marcó mi mundo en la enfermería, ya que me dieron la oportunidad de poder ejercer este tipo de cargo de jefatura. En mis 12 años de experiencia en otros centros, me he dado cuenta que Asodial tiene un sello, un sello que se ha creado desde las bases. Yo creo que desde la cercanía de gerencia, de administración, hacia los pacientes y los funcionarios. Y eso ha marcado bastante la diferencia. 

¿Qué destaca de su labor en la enfermería en diálisis? 

  • Es una experiencia muy bonita, ya que se crean lazos muy fuertes con los pacientes y funcionarios. Se crea un día a día. Acá el paciente es más que un número, somos todos personas. Lo he dicho siempre, con los pacientes se viven las alegrías, se viven las penas, pasan a ser parte de nuestra familia, son personas que están sometidas a la terapia dialítica tres veces a la semana y uno ya conoce historias, conoce qué hay detrás.

Conocemos cuando están tristes, cuando están alegres, y eso nos hace ser más humanos, conocer otras realidades. No es una atención que el paciente entra, se atiende y se va. Es algo continuo, es algo que se va sembrando en el tiempo, eso es lo bonito de estar trabajando en esta área, de mantener la continuidad durante el tiempo. Como en todo ámbito, hay momentos tristes también, pero es la ley de la vida y hay que saberlo llevar solamente.

Una de las cosas hermosas es llevar la continuidad de la atención hacia el paciente, conocerlo más allá de un número, no el paciente de la máquina dos o de la máquina tres, conocer la historia, crear los lazos, saber qué le pasa, ir un poco más allá. Eso es lo que a mí me gusta de esta área, ir más allá, conocer a la gente, conocer a su familia, las redes de apoyo, sacar una alegría, sacar una lágrima de emoción o llorar juntos, eso es lo que me gusta de esta carrera.

¿Cuál es el sello que a usted le gusta brindar cuando lleva a cabo sus funciones como enfermera?

  • Más allá del sello de que la calidad, que la seguridad del paciente, que son estándares que hemos logrado y manejamos a diario con todos los pacientes, es ir más allá. Es llegar a sacar una sonrisa en la cara del paciente, que no sea tanto la tortura de venir a diálisis, que se sienta en la confianza y la comodidad de expresarse, de expresar sus sentimientos. Yo creo que esa es la gran diferencia o el sello de Asodial, como en conjunto tanto de Quinteros como de El Belloto, de ir más allá, siempre un poco más allá marcando la diferencia. 

Y en este recorrido, ¿tiene alguna historia o un momento que haya marcado su trayectoria en Asodial?

  • Hay tantas historias que la gran mayoría son de pacientes que ya no están. Pero sí una de las historias que nos alegra el corazón hasta el día de hoy, me acuerdo, no puedo dar nombre ni fecha, estábamos en diálisis y de pronto me llaman por teléfono y me dice “señorita Pía me salió el riñón, voy camino al Fricke”.

Y esa alegría de que te llamen por teléfono, en esas circunstancias para avisar que se va a trasplantar, es impagable. Que te consideren de esa manera en un momento tan preciado para el paciente que está con su cabeza en otro lado, pensando que tiene que ir al hospital, donde se tiene que trasplantar, porque le salió el trasplante, etc, te llamen por teléfono, eso es impagable como la consideran a uno. 

La relación…

  • Exactamente, la relación, el apoyo, el apego, las alegrías, las penas, como vuelvo a decir anteriormente, va más allá. Si un paciente te pregunta, “y sus hijos cómo están, bien gracias” es porque nos conocemos, porque creamos vínculos, porque nos ven tristes, porque independiente que seamos personal de salud, el personal de salud también se enferma, también tiene pena, también está triste, también está alegre.

Somos seres humanos y muchas veces los pacientes se dan cuenta y también nos apoyan, y viceversa. El personal de salud también llega a conocer al paciente de diálisis que tiene altos y bajos, como todo ser humano. Y ahí estamos, siempre al lado del paciente apoyándolos. Yo creo que esa es una de las grandes diferencias de Asodial, el paciente no es tan solo un número, sino que es una persona.

Qué importante lo que dice justamente en una semana donde se celebra el Día Mundial de la Salud y donde es necesario recalcar el rol que cumplen los profesionales de la salud.

  • Claro, y de todas las áreas, tanto diálisis como intra, extrahospitalario, atención primaria, porque en todos los niveles de atención siempre va a haber un paciente, siempre. Esa es la importancia de celebrar al personal de la salud o como dice la Organización Mundial de la Salud, celebrar el Día Mundial de la Salud.

Desde el día a día con los pacientes, ¿cómo ve la situación de la Enfermedad Renal Crónica en nuestro país?

  • Lamentablemente, esta es una enfermedad va a ir en aumento. Nosotros vemos que cada vez va entrando gente más joven a diálisis, y es una realidad actual (…) estamos hablando de personas entre los 35 a los 55 años. Antiguamente se conocía como la enfermedad renal que atacaba solamente a los adultos mayores, pero actualmente va ingresando mucha gente en edad activa aún y si son pacientes que trabajan todavía y se vienen a dializar. 

Finalmente, ¿qué mensaje le gustaría dar a sus pacientes?

  • Yo quiero agradecer, siempre es bueno agradecer. Agradecer a los pacientes por la confianza que nos entregan día a día, agradecer al equipo, a todos los de recursos humanos, secretarias, auxiliares de servicio, las tens, las enfermeras, los médicos de turno, agradecer al equipo, porque sin un equipo o un buen equipo, no llegamos a puerto. Y agradecer al personal de Asodial de El Belloto por su compromiso, por su entrega día a día a las labores.